Un poco de doctrina
El arte de gobernar: la dirigencia política actual exige comportamientos éticos (ética y política) y esa fórmula no es la más importante, la fundamental es la estética y la política. Es decir la armoniosa potencia creativa del arte de gobernar.
Virtudes peronistas- Los hombres que no están animados de la prudencia que dan las virtudes, suelen ser negativos en la vida de los pueblos. (Discurso 24 de abril de 1953)
- La virtud es una cualidad adquirida. No existe en el ser humano por la sola acción de la naturaleza; por la naturaleza del hombre es capaz de virtudes; luego el hábito las desarrolla.
- Las virtudes se desarrollan después de haberlas practicado. Así, un hombre es valiente después de haber practicado actos de valor. Quiere decir que este hombre tiene naturalmente una capacidad de valentía, pero sólo en la práctica de actos de valor se configura un hombre valiente.
- Para el peronismo, la virtud es un hábito que establece armonía y equilibrio en el alma. La virtud es la salud del alma, así como el vicio es su enfermedad.
- "No concibo jamás que un hombre pueda vivir una vida plena sin cuerpo que sienta y sin alma que exprese los sentimientos que ese cuerpo experimenta" (Discurso del 14 de enero de 1953)
- La virtud, para la ética peronista, no exige desprendimiento de la vida, sino apego a ella, pues nuestra filosofía es filosofía de vida. De la vida, armonía de fuerzas que surgen del fondo inescrutable de la materia y del espíritu. De la vida, crisol de ideales que impulsan al hombre a la conquista diaria de su perfección.
- Las virtudes que señala la ética peronista son de origen popular, pues el Pueblo es el heredero de los trabajadores de todos los tiempos ...Por eso Perón ha dicho que lo mejor que tenemos es el pueblo, los trabajadores, en el sentido de que son los que más virtudes tienen.
Inundación en La Plata, barrio Tolosa, terruño de nuestra presidenta.
Humildad:la virtud suprema para los peronistas es la humildad. Perón ha dicho de la humildad que "es la mas grande de las condiciones del hombre" y Eva Perón la consideró "virtud cardinal del Peronismo"
